viernes, 12 de agosto de 2011

Amiga

La decepción es una amarga medicina que nos impone la realidad para traernos de nuevo a momento evolutivo que disfrutamos y nos rodea. Mas que disfrutar, padecer seria la palabra que lo pudiera definir.
Quien te desprecia se desprecia a si mismo, no a tu persona,  ha dicho Eugenia hoy cuando le cuento, con el tiempo se dará cuenta, aquí o allí, en cualquier departamento de la vida que cuando se cierra el corazón, éste queda encadenado a enfermedad y tristeza.

Cuando alguien no te da el valor que mereces, ignoralo y sigue, otros te lo darán de modo mejor y más justo.

Si repasas tu vida en retrospectiva breve, veras que cada cierto numero de años, en cada ciclo existencial, llegan a tu vida mejores y más afinados afectos.
Si el  amor que diste a alguien no retorna en compensación psicologica justa, ofrecelo a otras criaturas que harán de él mejor provecho. Este es un principio de economia y responsabilidad en la administración de los recursos.
El menoscabar del ingrato fue un presente que te fue concedido por el mismo, pues este revelo de pronto no ser más aquella personalidad que te alimentaría el corazón, liberándote involuntariamente para ser feliz con otras personas (que ya estaran cerca de ti, esperando que las llames para mayor intimidad), más maduras para comprenderte y asimilarte la oferta amorosa y se beneficiaran de hecho con la extension del afecto que presentabas aquel corazon menos sensible.
No te extrañes con las reacciones confusas de aquellos que se presentan como agentes de desagregación, ellos son lo que son. No puedes esperar coherencia de quien no sabe ser congruente con la propia identidad que sigue desconocida para ellos.
Respeta el derecho de aquellos que quieren separarse de ti o permite que se aparten si no se compatibilizan con tu forma de pensar o tu modo de ser.

Ajusta tus posibilidades de amor y en especial la capacidad de recepción de tus interlocutores, porque a menudo la donacion de afecto se convertirá en vicio para unos y si  la misma dadiva se hubiera dirijido a terceros hubiera podido incluso salvarles la vida.

Para quien no tiene sensibilidad afectiva, ternura y cariño siempre suenan falsos o sospechosos, llevando a quien recibe el fruto del bien querer a enlodar y manchar la fuente del amor de forma injusta e ingrata, estupida y suicida.

La permuta sincera de amor beneficia más a quien la da que a quien la recibe.

Con amigos asi, no es dificil levantar cualquier vuelo.
Gracias, amiga.

otra más

Ando buscando la verdad con pico y pala, ser feliz no sale gratis. Es necesario mucho esfuerzo, mucha decepción abrillantada, mucha valentía para volver a salir al sol después de la quemaduras profundas del alma, que cicatrizan con remedios de agua, que calman por momentos, pero no pueden evitar las brasas. Para que escribir si ya esta todo dicho, si cualquiera lo dijo antes que yo, mejor que yo.

Escribir para limpiar el alma y presentarla al escenario publico, entregada el alma a la duda y al asombro. Dejar correr las letras, dejar deslizarse la mano, como médium de si misma, permitiendo brotar desde la hondura, aquello que ni sabíamos que existía.
A trocitos  brota el texto, a trocitos extraidos de la mina negra del alma oscura. Buscando la luz y el aplauso de los que saben y no saben que tienen el poder de enterrarte y darte  mundo.
Triste victoria la del aplauso, que cambia como los deseo internos, sin motivo ni coherencia. Triste victoria si no se da sobre uno mismo y se busca a dios en el interior del alma triste.